Honduras cuenta entre sus atractivos turísticos con una serie de edificaciones producto del paso de los españoles por la entonces colonia. Entre todos ellos, uno de los más destacados es el Fuerte San Cristóbal, que se halla ubicado en la ciudad de Gracias, en el departamento de Lempira, construido justamente sobre una de las pequeñas cimas con las que cuenta esta localidad, y que antiguamente era el centro del poblado.

El Fuerte de San Cristóbal tomó especialmente dimensión en momentos en los que esta ciudad, que era llamada todavía “Gracias a Dios”, estaba constituida como un punto estratégico dentro de la Provincia de Honduras. Posteriormente, comenzó a perder trascendencia en la época pro independencia y seguidamente en la transición federal centroamericana.

Según explican los historiadores, este recinto fue levantado en los años 1875 y 1876, en momentos de la administración de José María Medina, y su finalidad no era otra que era la de defender la ciudad desde su punto estratégico de las invasiones de los ejércitos enemigos.

A día de hoy, aún destacan sus muros pintados en color blanco, donde eran colocadas las armas de fuego y cañones que defendían el perímetro. Cuenta además con varios torreones de vigilancia y en el centro descansa el cuartel de mando, polvorín, hospital, que pueden visitarse ya que se encuentran muy bien conservados.

Otro de los atractivos que presenta este espacio, para los amantes de la historia, es que allí se encuentra la tumba del presidente de Honduras Licenciado Juan Nepomuceno Fernández Lindo Juan Lindo.

Vía: Eco Honduras
Imagen: El Baúl de Josete