Las Cuevas de Cuyamel, se encuentran en las laderas interiores de los Montes Capira y Calentura y muy cerca de Trujillo.

Estas cuevas han sido ocupadas por diversos grupos étnicos desde la época precolombina, y para llegar a ellas, les será de mucha utilidad contratar a un guía, ya que están bien escondidas.

Prueba de la ocupación que han tenido estas cuevas en épocas pasadas, por lo menos en el Pre Clásico y el periodo Pre Clásico Medio, son los muchos vasos de arcilla en color marrón blanco y negro o rojo y gris, además de las botellas con estrías que se han encontrado.

También se han encontrado, efigies antropomorfas, botellas de composite y cuencos abiertos de fondo plano, además de artefactos de piedra y jarrones cilíndricos negros, bien pulidos que se han visto.

Los turistas que llegan a las cuevas, tienen que ir con un guía local, por seguridad y para que no se vayan a encontrar con sorpresas.

Además, para la práctica de espeleología, hace falta ir con zapatos adecuados al terreno, casco y al menos una linterna y algún dispositivo que les permita quedar ubicables en caso de derrumbe, o al menos, como mínimo, una cuerda que vaya dando más seguridad de que todo el grupo que va de excursión, esta cohesionado y caminando en la misma dirección.

No son pocas las cuevas que tienen laberintos en el suelo, lugares donde después se hace casi imposible salir, así que por prevención, una pequeña mochila con algunos implementos de emergencia no les vendrá nada mal.

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